
jueves, 17 de diciembre de 2009
¡FELIZ NAVIDAD!

martes, 15 de diciembre de 2009
LEER PARA...

miércoles, 9 de diciembre de 2009
martes, 1 de diciembre de 2009
ENCUENTRO CON J. A. COTRINA
.Ayer, día 30 de noviembre, los alumnos de 2º C y F de la ESO tuvieron ocasión de asistir a una charla coloquio con el novelista José Antonio Cotrina, autor de La casa de la colina negra, una apasionante novela de misterio que el profesor de ambos grupos ha escogido como lectura para este primer trimestre. El encuentro, que fue posible gracias a la gentileza de la Editorial Alfaguara, tuvo lugar en nuestra biblioteca a las11:45 de la mañana. Además de hacernos pasar un rato inolvidable, la editorial obsequiará a cada uno de los asistentes con un ejemplar de La cosecha de Sanheim, primera entrega de su saga El ciclo de la luna roja.

Comenzó por sus inicios… Nos contó que llegó a la literatura “como si fuera un juego”. Un cinexin estropeado cierta Noche de Reyes dio paso a una caja de Airgam Boys del espacio. Con ellos pasó meses jugando e inventando historias hasta que terminó escribiéndolas en un papel. Así, le vino la vocación de escritor y la de lector que, según él, van unidas.
A los diecisiete años quiso comprobar si lo que escribía le interesaba al público. Sus primeros textos fueron cuentos, más fáciles de publicar en aquel momento. Nos habló de los prejuicios hacia la literatura fantástica frente a la realista. Creía que en los últimos años, se había producido un boom de este tipo de novelas que había hecho que el mercado fuera más receptivo, pero se quejaba de que hasta hacía poco circulaba la idea de que sólo los americanos e ingleses escribían buena literatura fantástica.
También nos animó a encontrar “nuestro” libro… “Los libros puerta son aquellos que te enganchan. Si tienes la suerte de encontrar dos seguidos, sales disparado hacia la literatura”. El suyo fue La historia interminable de Michael Ende y todos nos quedamos pensando cuál había sido el nuestro o si tal vez aún estaba por llegar. Y tú ¿recuerdas tu libro puerta? ¿Todavía lo sigues buscando?
Respondió a nuestras preguntas y nos desveló su receta mágica para escribir un libro. Toma nota: 25% proceso físico de la escritura, 50% composición del libro en tu cabeza y 25% corrección. Un ingrediente más …: ¡la inspiración! que “es un momento mínimo, pero cuando llega es algo increíble y maravilloso”.
Aún nos reveló más ideas para ser escritores y habló de sus dos formas de enfrentarse con las historias: escribir con brújula o escribir con plano. Es decir, ir improvisando; o bien, tener muy claro qué quieres contar e ir directo hacia ese objetivo. Interesante ¿verdad?
Pues bien, éstos fueron algunos retazos de su intervención. Esperamos ansiosos nuestro regalo (gracias), para seguir descubriendo los fantásticos universos de José Antonio Cotrina.
lunes, 30 de noviembre de 2009
PREMIO A LA POESÍA MEXICANA
Os dejo con un vídeo homenaje de la Universidad Autónoma de México y un poema.
LA DIOSA BLANCA
Porque sabe cuánto la quiero y cómo hablo de ella en
su ausencia,
la nieve vino a despedirme.
Pintó de Brueghel los árboles.
Hizo dibujo de Hosukai el campo sombrío.
Imposible dar gusto a todos.
La nieve que para mí es la diosa, la novia,
Astarté, Diana, la eterna muchacha,
para otros es la enemiga, la bruja, la condenable a la hoguera.
Estorba sus labores y sus ganancias.
La odian por verla tanto y haber crecido con ella.
La relacionan con el sudario y la muerte.
A mis ojos en cambio es la joven vida, la Diosa Blanca
que abre los brazos y nos envuelve por un segundo y se marcha.
Le digo adiós, hasta luego, espero volver a verte algún día.
Adiós, espuma del aire, isla que dura un instante.
(KATSUSHIKA HOSUKAI: Winter Evening in Japan)
jueves, 26 de noviembre de 2009
SE SIGUE PEINANDO DE LA MISMA MANERA
Celebramos hoy el centenario de Eugène Ionesco (Slatina, Rumania, 26 de noviembre de 1909-París, 28 de marzo de 1994), padre del teatro del absurdo o, mejor dicho, el teatro de la burla. Verdadero renovador del lenguaje dramático, fue autor de obras ("antiobras" le gustaba decir a él) tan importantes para el teatro contemporáneo como La cantante calva, El rey se muere, El rinoceronte o Las sillas. Su primera obra (La cantante calva) se estrenó en el Théâtre des Noctambules de París el 11 de mayo de 1950. Desde entonces se ha representado casi 17.000 veces, un hito de la cartelera mundial que se explica en términos inmediatos porque no ha dejado de interpretarse ningún día desde 1957. Todavía hoy perduran el vestuario y la dramaturgia originales. Ha muerto el protagonista que la estrenó, pero otras generaciones han sucedido a la 'troupe' fundacional y han observado la devoción a Ionesco. Medio siglo de lealtad a una obra en la que se dan la mano la angustia, el humor y el sinsentido, la soledad del hombre y la insignificancia de su existencia. Tanto tiempo después, en plena era de la (in)comunicación, la cantante calva -que no es calva ni cantante porque no hay cantante alguna en esta obra absurda y genial- "se sigue peinando de la misma manera".Los actos del centenario de Ionesco quedan resumidos en la exposición que la Biblioteca Nacional de Francia dedica al escritor hasta enero del año próximo. El valor máximo de la exposición de la BNF se refiere a la procedencia de su contenido: manuscritos, correspondencia personal, dibujos, croquis preparatorios de sus obras, guiones cinematográficos, fotografías, pinturas del propio Ionesco o de amigos como Miró, Giacometti, Vieira da Silva, Alechinsky o Arrabal, objetos personales como el librito del método Assimil para aprendizaje rápido del inglés, germen de La cantante calva... En resumen, un pequeño tesoro procedente de los propios archivos personales del autor.
miércoles, 25 de noviembre de 2009
FERLOSIO, PREMIO NACIONAL DE LAS LETRAS
Ayer el Ministerio de Cultura concedió el Premio Nacional de las Letras Españolas 2009 al escritor Rafael Sánchez Ferlosio. El galardón, dotado con 40.000 euros, distingue el conjunto de la labor literaria de un autor español. Al conocer la noticia, el escritor (que ya fue Premio Cervantes) reconocía con su habitual franqueza: "Me ha sorprendido este nuevo premio. La verdad es que me dan demasiados (...), yo he vivido más de premios que de otra cosa".Hijo de padre español (el escritor Rafael Sánchez Mazas) y madre italiana, Rafael Sánchez Ferlosio nació en Roma en 1927. Sus dos primeras obras publicadas, Industrias y andanzas de Alfanhui (1951) y El Jarama (1955), ya lo situaron como uno de los escritores más destacados de su generación. Entre su amplia trayectoria literaria y ensayística destacan El testimonio de Yarfoz, Mientras no cambien los dioses, nada ha cambiado, El ejército nacional, Esas Yndias equivocadas y malditas, El alma y la vergüenza, La hija de la guerra y la madre de la patria o Non olet. Hace tan sólo unos meses Destino publicó su última obra hasta el momento, Guapo y sus isótopos.
Miguel Delibes ha dicho de él que es el hombre más importante de nuestra literatura, y Víctor García de la Concha, director de la Real Academia Española, que se trata de un soberano escritor cuyos ensayos son piezas literarias y ejemplos de la mejor literatura.
CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA (3)

Me dirijo a usted para pedirle por favor que haga algo contra el maltrato.
No es normal que en España mueran más de 60 mujeres al año por culpa de sus parejas. O que pierdan su trabajo o incluso su vida anterior y acaben viviendo en la calle porque su pareja la maltrata sicológicamente o físicamente. Y las pocas que se deciden a denunciarlo, al cabo de los años, acaban muertas. Usted se puede imaginar lo que deben de estar sufriendo esas mujeres y también cómo se sienten los hijos de esas familias viendo cómo su padre está pegando a su madre todos los días. Esas pocas mujeres que tienen el valor de denunciar, están ya cansadas porque la policía no hace nada, lo único que pueden hacer es poner una orden de alejamiento, pero con eso no haces nada, porque ese hombre puede coger un día un arma y matarla. Y la policía, ¿qué ha hecho entonces?, darle motivos al hombre para matarla. Porque si antes de denunciarle la pegaba, ya después de denunciarlo, al estar más cabreado y al darle motivos, irá a por ella y la matará. Si usted no piensa en esas mujeres por lo menos piense en esos niños que no pueden vivir siempre pensando que su madre está muerta porque su padre, sin motivos y porque le dio la gana, la ha matado. Piense por un momento en eso, y si le parece oportuno, haga algo para remediarlo.
Gracias por su atención y perdone las molestias. Un saludo.
Isabela David
CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA (2)
Maltrato: comportamiento violento que causa daño físico o moral.Violencia: uso de la fuerza o la intimidación para dominar al otro o para hacerle daño.
Yo personalmente estoy en contra de la violencia machista (bueno, de toda violencia en general) porque a causa de ella mueren muchas mujeres en el mundo, me siento indignada e impotente cuando un hombre pega a una mujer o la maltrata psicológicamente, por que se cree superior y tanto hombres como mujeres somos iguales.
Lo que más rabia me da es que esos hombres siempre consiguen que ellas se crean inferiores, que ellas piensen que lo hacen todo mal, piensan que merecen sus golpes, que son inútiles y que no sirven para nada.
¡Abrid los ojos, por favor!
Ainoa Redondo Pozo, 4ºDIV
Me parece ilógico que un ser humano maltrate a otro psicológica y físicamente hasta llegar a matarla, sean del mismo sexo o de distintos. Creo que este problema de la sociedad debe ser erradicado en todo el planeta. Este problema podría desaparecer, si los padres que maltrataban a sus hijos durante su infancia no lo hubieran hecho. Así los hombres en el futuro no tendrán nada de violencia retenida y no tendrán que quitarse el peso de encima pegando a sus mujeres.
O por otro lado que los cansinos ex–novios se fueran por su cuenta y dejaran de incordiar a su ex–pareja. Y en los casos que después de que el maltrato se produzca sea denunciado, que la policía empezara a controlarlo.
Luis García Román
Las personas deben tener más conciencia sobre este tema, mientras que los maltratadores, deberían estar con una vigilancia fiable para que no vuelvan a repetir sus agresiones y para que no causen más víctimas.
Creo que para que disminuya la violencia de género se deberían poner penas de cárcel mayores como por ejemplo la cadena perpetua.
Sergio Muñoz De Pablos
*
Estoy en contra de la violencia machista porque me parece mal que el hombre pegue a la mujer por la razón que sea. Hay muchos casos que llegan hasta matarlas.
Se podría acabar la violencia de género con pena a cadena perpetua para que no puedan salir y matar o pegar a más mujeres.
Al igual que la violencia infantil, estoy en contra porque los niños no se pueden defender. El remedio para que no pase es que se quejen los niños y que los padres no vuelvan a ver a sus hijos.
Othman Hajjaj Serroukh
*
Uno de los remedios contra el maltrato es que las parejas deben contarse todo, tener confianza y no ocultarse nada.
Ebrima Sagnia Sowe
CONTRA LA VIOLENCIA MACHISTA

Tengo sed. Me has quitado las praderas del norte,
regadas por arroyos de respeto y cariño.
Tengo frío. Te has ido con el sur de mi alcoba,
dejándome las huellas de tu hielo en mi cuerpo.
No sé qué hacer. La vida me parece una tumba
donde me has enterrado viva, una oscuridad
irrespirable, un túnel sin salida, una muerte
prolongada, el vacío, la ausencia, el desamparo.
Me siento tan vencida por tu odio, tan débil,
tan aterrorizada y tan inexistente,
que no puedo llorar, ni llamar por teléfono
a mis padres (que acaso me dirían: “Aguanta,
que por algo naciste mujer”), ni hacerle señas
a la vecina desde la ventana. Me quedo
acurrucada en un rincón del dormitorio
esperando que vuelvas y sigas arrasando
con gestos de desprecio, con golpes y con gritos
aquel campo de amor que cultivamos juntos.
martes, 24 de noviembre de 2009
EL TERRITORIO DE LO QUE SOMOS
Cuando era niño, fascinado por las aventuras de los personajes de las novelas que leía, creía que lo sustantivo de la literatura se hallaba en los azarosos riesgos y en las recurrentes sorpresas de las tramas, de los argumentos. En aquellas lecturas fervorosas, las acciones de los intrépidos protagonistas que, a pesar de tantos y tan continuos peligros, llevaban a cabo sus propósitos, eran para mí el motivo principal de mi compenetración con ellos. El paso de los años me fue descubriendo cualidades literarias menos evidentes que mi poca edad no me había permitido vislumbrar antes, y profundicé en aspectos que entonces no pude siquiera imaginarme, aunque ya los cuentos populares escuchados y leídos me habían advertido de lo que era la sustancia de la ficción, por encima de las peripecias y más allá de que transcurriesen en espacios maravillosos o exóticos: un testimonio peculiar del modo de ser de la gente, de su manera de actuar, un panorama completo, minucioso, de las extrañas, diversas, innumerables, formas del comportamiento humano. Maneras de sentir. Conforme me iba haciendo mayor fui teniendo cada vez más relación con los habitantes de la realidad, y muy a menudo me desconcertaban determinadas actitudes en los demás o en mí mismo, porque no era capaz de desentrañar de modo cabal su significado. Para mí era evidente que, frente a la opacidad de lo real que me rodeaba, a lo inescrutable o contradictorio de muchas conductas, el mundo de la literatura era diáfano, claro, y los personajes de las novelas me permitían entrar sin restricciones ni dificultades en su interior. Así fue como, para empezar, descubrí que las páginas de las novelas que yo iba pasando, absorto en su lectura, eran puertas sucesivas que me daban entrada a un país único, incomparable, el territorio donde se mostraban con claridad todas las posibles maneras de ser y de sentir, con sus ambigüedades y matices: la lealtad y la traición, el heroísmo y la cobardía, la avaricia y la generosidad, el amor y el odio, la atracción y la repulsa, lo piadoso y lo cruel. De ese modo conocí la nostalgia de Heidi, la osadía de Jim Hawkins y de D'Artagnan, la lealtad de Gabriel Araceli y de Miguel Strogoff, la doblez de John Silver y de Uriah Heep, el afán científico y justiciero del capitán Nemo, la potencia imaginativa de Tom Sawyer y de Guillermo Brown, la perspicacia de Sherlock Holmes, la caballerosidad de Phileas Fogg, la melancolía de Mowgli. Sutiles enlaces. Con el correr del tiempo, fui ya del todo consciente de que nunca podría entrar en los secretos del comportarse de los seres de carne y hueso, como yo mismo y quienes me rodean, con la diafanidad con que lo hago en los de la literatura: desde el colérico Aquiles hasta el desconcertado Gregorio Samsa, madame Bovary, Ana Karenina, Raskolnikov, doña Berta de Rondaliego, «Bola de Sebo», los Snopes, Hans Castorp, Francisco Torquemada, Segismundo, Oblómov, Humbert Humbert, Molly Bloom, Charles Bingley, Hamlet, un tal Hans Pfaall y tantos otros más, me han enseñado a conocer bastante a los seres humanos de la realidad y un poco mejor a mí mismo. Burla burlando, en un momento de El rojo y el negro, para explicar la confusión de madame de Rênal ante la persistencia del joven Julian Sorel en sus requerimientos amorosos, Stendhal cuenta: "Como madame de Rênal no leía novelas, no sabía lo que le estaba sucediendo". Además, la progresión, la abundancia y la riqueza de las lecturas me permitió saber que sutiles enlaces comunican a casi todas ellas, para ordenarlas en mundos característicos: comprendí que la búsqueda del tesoro que intenta La Hispaniola evoca aquella del vellocino de oro que emprendieron Jasón y sus argonautas, y la del Grial de los caballeros artúricos, como la aventura de Huck Finn intentando liberar a su compañero y ayudante, el esclavo Jim, o el ingenio de Kim para la supervivencia propia y del Lama a quien acompaña en busca del Río de la Flecha, no dejan de reproducir ciertas actitudes del ingenioso hidalgo y caballero don Quijote de la Mancha, ayudado por Sancho Panza en su lucha contra los hechiceros y las injusticias, del mismo modo que el mono Hanuman ayudó a Rama en su empresa de rescatar a Sita del poder de los demonios, y también cómo el esfuerzo perseverante de Robinson Crusoe para construir en la isla virginal de su naufragio un lugar de civilización, reproduce todos los mitos originarios sobre la creación del mundo desde la nada. Y muy a menudo, en las narraciones que releo o leo por primera vez, reconozco, disfrazado por el cambio de época, el eco de alguno de los episodios que vivió aquel varón de multiforme ingenio llamado Odiseo, a quien resultó tan complicado regresar a su casa. El tiempo de la vida. Debo añadir algo que ahora también sé: esas puertas pequeñas, flexibles, de las novelas y de los libros de cuentos, no sólo me han permitido entrar en la médula de las conductas humanas, sino comprender en su verdadera atmósfera material y moral los ámbitos físicos donde vamos cumpliendo nuestro misterioso destino, desde las comarcas, aldeas y megalópolis que evocan las reales, hasta otras poblaciones y lugares sólo construidos con materiales fabulosos. Y en todos ellos he percibido transcurrir el tiempo de la vida, el de la dicha y el del dolor, el de las esperanzas y el de las desilusiones, con una perspectiva y una lucidez que no me permite el fluir vertiginoso del tiempo de mi particular realidad. Muchos creen todavía en la falacia aristotélica, que sólo en la Historia está el archivo seguro de nuestras circunstancias, pero el más certero registro de lo que caracteriza a la especie humana, donde verdaderamente se encuentra la historia de nuestro corazón a lo largo de los milenios, es en la literatura, constituida desde la capacidad simbólica que nos identifica. Leer nos da acceso al gran espacio de la imaginación reveladora: el país de lo que somos, el territorio de lo que sentimos. domingo, 22 de noviembre de 2009
viernes, 20 de noviembre de 2009
EN EL DÍA DE LOS DERECHOS DE LOS NIÑOS

EL NIÑO YUNTERO
Carne de yugo, ha nacido
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace, como la herramienta,
a los golpes destinado,
de una tierra descontenta
y un insastisfecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas, trae a la vida
un alma color de olivo
vieja ya y encallecida.
Empieza a sentir, y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe,
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja, y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge de lluvia y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido,
con una ambición de muerte
despedaza un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raíz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de la sepultura.
Y como raíz se hunde
en la tierra lentamente,
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
revuelve mi alma de encina.
Le veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
y declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta,
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
¿Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena?
¿De dónde saldrá el martillo
verdugo de esta cadena?
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
martes, 17 de noviembre de 2009
EL SEÑOR DE LAS MOSCAS, de William Golding

LUIS GARCÍA ROMÁN
lunes, 16 de noviembre de 2009
jueves, 12 de noviembre de 2009
¡PÁSATE POR LA BIBLIOTECA! (II)
miércoles, 11 de noviembre de 2009
ALUMNOS COLABORADORES
lunes, 9 de noviembre de 2009
"DIE MAUER IST WEG"
EPIGRAMA CON MURO
Entre tú y yo/mengana mía/ se levantaba
un muro de Berlín hecho de horas desiertas
añoranzas fugaces
tú no podías verme porque montaban guardia
los rencores ajenos
yo no podía verte porque me encandilaba
el sol de tus augurios
y no obstante solía preguntarme
cómo serías en tu espera
si abrirías por ejemplo los brazos
para abrazar mi ausencia
pero el muro cayó
se fue cayendo
nadie supo qué hacer con los malentendidos
hubo quien los juntó como reliquias
y de pronto una tarde
te vi emerger por un hueco de niebla
y pasar a mi lado sin llamarme
ni tocarme ni verme
y correr al encuentro de otro rostro
rebosante de calma cotidiana
otro rostro que tal vez ignoraba
que entre tú y yo existía
había existido
un muro de Berlín que al separarnos
desesperadamente nos juntaba
ese muro que ahora es sólo escombros
más escombros y olvido.
jueves, 5 de noviembre de 2009
miércoles, 4 de noviembre de 2009
ENCUENTRO CON MARCOS ANA
Decidme cómo es un árbol.
Decidme el canto de un río
cuando se cubre de pájaros.
Habladme del mar. Habladme
del olor ancho del campo.
De las estrellas. Del aire.
Recitadme un horizonte
sin cerradura y sin llaves
como la choza de un pobre.
Decidme cómo es el beso
de una mujer. Dadme el nombre
del amor: no lo recuerdo.
(¿Aún las noches se perfuman
de enamorados con tiemblos
de pasión bajo la luna?
¿O sólo queda esta fosa,
la luz de una cerradura
y la canción de mis losas?)
22 años. Ya olvido
la dimensión de las cosas,
su color, su aroma… Escribo
a tientas: "El mar", "El campo…"
Digo "Bosque" y he perdido
la geometría del árbol.
Hablo por hablar de asuntos
que los años me borraron.
… … … … … … …
(No puedo seguir: escucho
los pasos del funcionario).
martes, 3 de noviembre de 2009
103 AÑOS DE LUCIDEZ
Hoy ha fallecido en Madrid, a los 103 años de edad (los había cumplido el pasado 16 de marzo), Francisco Ayala. Docente, narrador y ensayista, fue una voz imprescindible en la cultura española del siglo xx. Su extensa obra, en la que merecen una mención especial la recopilación de relatos El rapto y las novelas Muertes de perro y El fondo del vaso, le hizo merecedor de los premios más importantes de nuestras letras: del Cervantes (en 1991) al Príncipe de Asturias (tres años antes). Era miembro de la Real Academia Española de la Lengua desde 1984. Nacido en Granada, estudió Derecho y Filosofía, se exilió tras la guerra civil y no regresó a España hasta la muerte del general Franco. 103 años lo contemplaron: 103 años de lucidez, de coherencia, de intensidad, de mesura, de creatividad, de entusiasmo... Nunca cerró sus ojos al mundo. Tal vez por eso fue tan longevo.
domingo, 1 de noviembre de 2009
DÍA DE DIFUNTOS

Aquel que ha sentido una vez en sus manos temblar la alegría
no podrá morir nunca.
Yo lo veo muy claro en mi noche completa.
Me costó muchos siglos de muerte poder comprenderlo,
muchos siglos de olvido y de sombra constante,
muchos siglos de darle mi cuerpo extinguido
Ahora el aire, allá arriba, más alto que el suelo que pisan los vivos,
será azul. Temblará estremecido, rompiéndose,
desgarrado su vidrio oloroso por claras campanas,
por el curvo volar de gorriones,
por las flores doradas y blancas de esencias frutales.
(Yo una vez hice un ramo con ellas.
Puede ser que después arrojara las flores al agua,
puede ser que le diera las flores a un niño pequeño,
que llenara de flores alguna cabeza que ya no recuerdo,
que a mi madre llevara las flores:
yo querría poner primavera en sus manos.)
¡Será ya primavera allá arriba!
Pero yo que he sentido una vez en mis manos temblar la alegría
no podré morir nunca.
Pero yo que he tocado una vez las agudas agujas del pino
no podré morir nunca.
Morirán los que nunca jamás sorprendieron
aquel vago pasar de la loca alegría.
Pero yo que he tenido su tibia hermosura en mis manos
no podré morir nunca.
Aunque muera mi cuerpo, y no quede memoria de mí.
JOSÉ HIERRO
martes, 27 de octubre de 2009
TAMPOCO A MÍ ME GUSTA (Elogio adolescente de la lectura)

A mí tampoco me gustaba leer. Ya lo han adivinado. Recuerdo aquellos días. Los recuerdo porque yo era feliz. Tenía catorce años, dicho queda. Leer me parecía, como poco, aburrido. Era lento, pesado, interminable, inútil. Todavía sigue pareciéndome inútil. La vida no es mejor, pero es más ancha ahora. Eso quería decir. Feliz, catorce años. Un final repentino del verano. Nada que hacer. Un libro despistado. La suerte estaba echada. Desde entonces no hay día en que no me pregunte: ¿Por qué leer?
Leer no hace mejor las cosas, hay que decirlo pronto, pero mejora mucho, valiente paradoja nuestra vista casada, nuestra visión del mundo. Leer es una forma de ensanchar nuestro asombro. Y el asombro no es más que la forma más grande que existe de estar vivo. Es una garantía contra el aburrimiento, contra la prepotencia, contra la pobre creencia de que todo está en deuda con nuestros grandes méritos. “Que nadie es más que otro si no hace más que otro”, dice, sabio, el Quijote.
Un libro es un depósito de momentos felices, un lugar donde la vida es justa, un refugio. La emoción es refugio, la memoria, también. No otra cosa es un libro: emoción y memoria. Alguien dijo que un hombre que hubiera vivido un solo día en libertad habría atesorado recuerdos suficientes para pasar el resto de su vida en la cárcel. A veces pienso en situaciones extremas. No en bibliotecas cómodas llenas de libros nuevos. Pienso en un hombre solo y en un solo libro. Ni siquiera en un libro: en su recuerdo apenas. A eso me refiero cuando hablo de refugio. ¿No lo es, en medio de lo peor del día, el recuerdo de los días felices? Eso es también un libro. El lugar en el que alguien ha escrito que nunca estamos solos.
Un partido de fútbol –recuerdo todavía de aquel verano de los catorce años- es mucho más intenso cuando uno conoce las reglas, la estrategia, el nombre de algunos jugadores. Pues bien, los libros también tienen un poco de instrucciones de uso de la vida. No dicen, por supuesto, cómo hay que vivirla, sólo nos hacen libres para montar las piezas de este rompecabezas gratuito e impagable, vertiginoso como un salto mortal.
A veces las palabras más llenas de sentido son también las más vanas. Libertad, eso dije. ¿Por qué leer, en fin? Porque nos hace libres. Libres para saber que nuestra vida es nuestra. Para saber también que no toda la gente ha tenido la misma suerte que tuvimos nosotros. Para saber que esa suerte imprevista no nos hace mejores.
Ni complejo ni orgullo: instrucciones para ponerse un tiempo en los huesos de otro, en la piel de cualquiera. Valgan grandes palabras por grandes ocasiones: compasión.
Leer sirve de poco si no sirve a la vida. Hay eruditos para los que diez mil libros no son más que una cifra. Sabio es el que transforma un dato en una idea para volverlo humano. Por eso toda biblioteca es antes un taller que un almacén, más viña que bodega.
“Tampoco a mí me gusta / pero al leerla / con absoluto desprecio / encontramos, al fin, / sitio para lo auténtico”. Así habla Marianne Moore en un poema titulado “Poesía”. A veces pienso, y pienso en el escándalo que sería para mis tías, que a los libros les conviene un poco de desprecio. Una lectura sin hacer concesiones. Es allí donde dan sus frutos más cuajados.
¿Por qué leer? La pregunta persiste.
Porque nos hace humanos. Y libres, compasivos. Y felices a veces. Y porque en ocasiones tampoco cuesta tanto, por más que cueste un mundo, dar la razón a nuestras tías solteras.
martes, 20 de octubre de 2009
SIGLO DE ORO
lunes, 19 de octubre de 2009
sábado, 17 de octubre de 2009
EN EL CENTENARIO DE LEOPOLDO PANERO
Ya empieza tu sonrisa,
como el son de la lluvia en los cristales.
La tarde vibra al fondo de frescura,
y brota de la tierra un olor suave,
un olor parecido a tu sonrisa,
y a mover tu sonrisa como un sauce
con el aura de abril; la lluvia roza
vagamente el paisaje,
y hacia adentro se pierde tu sonrisa,
y hacia dentro se borra y se deshace,
y hacia el alma me lleva,
desde el alma me trae,
atónito, a tu lado.
Ya tu sonrisa entre mis labios arde,
y oliendo en ella estoy a tierra limpia,
y a luz, y a la frescura de la tarde
donde brilla de nuevo el sol, y el iris,
movido levemente por el aire,
es como tu sonrisa que se acaba
dejando su hermosura entre los árboles...

jueves, 15 de octubre de 2009
NUESTRA POESÍA EN EL TIEMPO (UNA ANTOLOGÍA)
miércoles, 14 de octubre de 2009
martes, 13 de octubre de 2009
LA LADRONA DE LIBROS, de Markus Zusak
Entre 1939 y 1945, una niña alemana, de nueve años al comienzo de la acción, vive con un matrimonio que la acoge cuando su madre, enferma, pobre y perseguida por sus afinidades comunistas, la entrega en acogida por no poder mantenerla. La guerra, el hambre, la presión de las autoridades y el problema de los judíos, que ella vive de cerca ya que en su casa hay uno escondido en el sótano, marcan su paso de la infancia a la adolescencia con rasgos de tristeza y dolor. Sin embargo, su padre adoptivo, que la enseña a leer, abre para ella un mundo de consuelo y refugio a través de los libros, que desea tanto que llega a robarlos. El autor, australiano, se ha inspirado en recuerdos y vivencias de sus padres, venidos de Europa, para elaborar un elogio de la lectura como tabla de salvación incluso en los peores momentos. Escrita con una técnica muy original, que incorpora con buenos resultados muchos elementos gráficos, y narrada por un testigo tan privilegiado como sorprendente, esta novela seduce por su mezcla de dramático realismo, humor, poesía y ternura de sentimientos. Los personajes están todos muy bien trazados, la acción es ágil aunque bastante extensa, y el estilo, sencillo y dinámico, encierra una lapidaria expresividad. Al margen de críticas ideológicas y distinciones demagógicas entre buenos y malos, la obra pone de manifiesto el sufrimiento de los civiles en la guerra, y destaca la lectura como antídoto de la desesperación y la familia y la amistad como lo más valioso que posee el ser humano. miércoles, 7 de octubre de 2009
NOSTALGIA DE ALEJANDRÍA
Anoche tuve el privilegio de asistir al multitudinario preestreno de Ágora, la nueva película de Alejandro Amenábar, sin duda la producción más deseada del cine español de los últimos tiempos. Un alegato contra la intolerancia y el fanatismo, una historia épica sobre la libertad, la sed de conocimiento y la fe en la filosofía.Una gran superproducción, una película arriesgada que, probablemente, no gustará a todo el mundo, pero que no dejará indiferente a nadie y emocionará a quienes aman la ciencia, la filosofía y el pensamiento libre.
Se estrena en los cines españoles el próximo viernes 9 de octubre. No os la perdáis.
martes, 6 de octubre de 2009
THE BIG PICTURE
Vía MÁS QUE LIBROS, os ofrecemos la posibilidad de descargaros un marcapáginas conmemorativo, mientras seguimos trabajando para proporcionaros una biblioteca cada vez más atractiva y cercana.
lunes, 5 de octubre de 2009
viernes, 2 de octubre de 2009
JUAN CARLOS MESTRE, PREMIO NACIONAL DE POESÍA
El poeta y artista visual Juan Carlos Mestre ha ganado el Premio Nacional de Poesía, otorgado por el Ministerio de Cultura, por su poemario La casa roja, una obra en la que dialogan gran parte de las tradiciones y culturas existentes.Mestre, nacido en Villafranca del Bierzo (León) en 1957, tras conocer la noticia dice sentirse "contento", pero ha querido aclarar que los premios "son fruto de la generosidad o de la equivocación". "Los premios carecen de importancia, sobre todo cuando pienso en tantos amigos cuya obra está a años luz de la propia y que se han ido al paraíso de la utopía sin reconocimientos".
Este premio, dotado con 20.000 euros, se concede a la mejor obra de poesía publicada en España en 2008, ya sea en castellano o en algunas de las otras lenguas cooficiales.
Publicada por Calambur, La casa roja, "sin abandonar la raíz permanente de la mitología personal de Mestre, interroga a los más reveladores derroteros del pensamiento poético contemporáneo, en un diálogo crítico y ético apasionante", según afirma Javier Bello en la solapa del libro.
Su primer poemario fue Siete poemas escritos junto a la lluvia. A éste le siguieron La visita de Safo, Antífona del otoño en el valle del Bierzo, La poesía ha caído en desgracia y La tumba de Keats, entre otros.

LECTURAS SEGUNDO BACHILLERATO
Siglo XVIII
- El Sí de las niñas, L. Fernández de Moratín (Teatro)
- Tristana, Benito Pérez Galdós (Novela)
Siglo XX
- El árbol de la ciencia, Pío Baroja (Novela)
- Ancia, Blas de Otero (Poesía)
Notas aclaratorias: - Se puede leer en cualquier editorial.
- Aparecerán en este mismo blog algunos comentarios críticos de estos mismos libros; incluso de algunos habrá más de un comentario para que el alumno elija el que más le interese o haga una síntesis de ambos.
- Cuando se considere oportuno, aparecerán algunos apuntes o resúmenes que consideremos relevantes.
- En alguna ocasión subiremos alguna actividad que el alumno tendrá que realizar.







