Hoy ha fallecido en Madrid, a los 103 años de edad (los había cumplido el pasado 16 de marzo), Francisco Ayala. Docente, narrador y ensayista, fue una voz imprescindible en la cultura española del siglo xx. Su extensa obra, en la que merecen una mención especial la recopilación de relatos El rapto y las novelas Muertes de perro y El fondo del vaso, le hizo merecedor de los premios más importantes de nuestras letras: del Cervantes (en 1991) al Príncipe de Asturias (tres años antes). Era miembro de la Real Academia Española de la Lengua desde 1984. Nacido en Granada, estudió Derecho y Filosofía, se exilió tras la guerra civil y no regresó a España hasta la muerte del general Franco. 103 años lo contemplaron: 103 años de lucidez, de coherencia, de intensidad, de mesura, de creatividad, de entusiasmo... Nunca cerró sus ojos al mundo. Tal vez por eso fue tan longevo.
martes, 3 de noviembre de 2009
103 AÑOS DE LUCIDEZ
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1 comentario:
Yo llegué a pensar que tenía el don de la inmortalidad...Qué triste.
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