El poeta catalán Joan Margarit ha ganado el Premio Nacional de Poesía, que otorga el Ministerio de Cultura, por su poemario Casa de Misericordia, una obra que ya había obtenido el Premio Nacional de la Crítica, el Rosalía de Castro y el de Poesía de Catalunya. Este premio, dotado con 20.000 euros, se concede a la mejor obra de poesía publicada en 2007 en español o en algunas de las otras lenguas cooficiales que se hablan en España.
Margarit, que se define como poeta bilingüe en castellano y catalán, es arquitecto y catedrático de Cálculo de Estructuras de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, ya jubilado.
Margarit, que se define como poeta bilingüe en castellano y catalán, es arquitecto y catedrático de Cálculo de Estructuras de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Barcelona, ya jubilado.
El poeta explica en el Epílogo el título del poemario: "El título de este libro es el de uno de los poemas que contiene y que comencé a concebir mientras visitaba una exposición sobre la Casa de Misericordia, donde podían verse fotografías y documentos ligados a la historia de esta institución. Tres cosas quedaron en mi mente: en primer lugar, el edificio, enorme, austero y bruñido de tan limpio, con los niños y las niñas siempre graves y en orden, en pie o sentados, en un orden casi militar. En segundo lugar, las solicitudes, muchas de las cuales eran de viudas de asesinados en la represión del final de la guerra civil, que pedían el ingreso de sus hijos por imposibilidad de mantenerlos. En tercer lugar, los informes de los jueces y otros funcionarios del nuevo régimen sobre aquellas solicitudes."
CASA DE MISERICORDIA
El padre fusilado.
O, como dice el juez, ejecutado.
La madre, ahora, la miseria, el hambre,
la instancia que le escribe alguien a máquina:
Saludo al Vencedor, Segundo Año Triunfal,
Solicito a Vuecencia poder dejar mis hijos
en esta Casa de Misericordia.
El frío del mañana está en la instancia.
Hospicios y orfanatos fueron duros,
pero más dura era la intemperie.
La verdadera caridad da miedo.
Igual que la poesía: un buen poema,
por más bello que sea, será cruel.
No hay nada más. La poesía es hoy
la última casa de misericordia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario