Este año será probablemente recordado como el año de la crisis económica, el año del Mundial de Sudáfrica o el año de la nueva PAU. Para BIBLORANCA (donde los años se cuentan por cursos) ha estado lleno de novedades y de intenso trabajo. Nosotros lo recordaremos como el año en que celebramos a Miguel Hernández y lloramos por Miguel Delibes. Pero hoy, a punto de extinguirse, este curso 2009-2010 nos sorprende con una noticia triste para la cultura: la muerte de José Saramago. El escritor portugués, premio Nobel de Literatura 1998, ha fallecido esta mañana en la isla de Lanzarote, donde residía desde 1991. Nacido en 1922 en el seno de una familia humilde, tuvo que trabajar desde los doce años y abandonar sus estudios, lo que no le impidió formarse a través de la lectura y convertirse en un escritor de proyección universal. Miembro del Partido Comunista Portugués, fue durante toda su vida un intelectual comprometido con los grandes problemas sociales y políticos de la humanidad.
Autor de más de treinta obras (Memorial del convento, El evangelio según Jesucristo, Ensayo sobre la ceguera, La caverna, El viaje del elefante, Caín...), para mí será siempre, sobre todo, el creador de El año de la muerte de Ricardo Reis, ese fascinante recorrido por una ciudad (Lisboa), un poeta (Fernando Pessoa) y un año (1936) crucial para la historia europea.
3 comentarios:
Muy triste. Uno de los escritores más fascinantes que he leído, y del que siempre he admirado su compromiso social y humano.
Sí que es triste; suscribo totalmente el comentario de Carlota.
Parecía inmortal pero se ha ido. Lo mejor que podemos hacer es leer su obra para que Saramago se haga eterno a través de sus palabras.
Un saludo.
Virginia
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