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Yo voy soñando caminos
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
de la tarde. ¡Las colinas
doradas, los verdes pinos,
las polvorientas encinas!...
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¿Adónde el camino irá?
Yo voy cantando, viajero
Yo voy cantando, viajero
a lo largo del sendero...
- la tarde cayendo está-.
"En el corazón tenía
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón".
la espina de una pasión;
logré arrancármela un día:
ya no siento el corazón".
Y todo el campo un momento
se queda, mudo y sombrío,
meditando. Suena el viento
en los álamos del río.
La tarde más se oscurece;
y el camino que serpea
y débilmente blanquea
se enturbia y desaparece.
Mi cantar vuelve a plañir:
"Aguda espina dorada,
quién te pudiera sentir
en el corazón clavada".
He elegido este poema porque el autor se expresa muy bien, reflejando sus sentimientos en un paisaje, va describiendo el paisaje de manera que muestra sus sentimientos y llega a la conclusión de que prefiere vivir sufriendo por amor a vivir sintiendo ese vacío dentro por haberse sacado esa espina de amor.
El camino (Octavio Fioravanti)
He elegido este cuadro para este poema porque el poema habla de un camino y en el cuadro aparece un camino, también habla de las colinas doradas y que también aparecen en el cuadro, en resumen el poema describe casi a la perfección el cuadro y me ha parecido que era perfecto para este poema.
RAQUEL BORREGUERO, 3º DIV.
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